Heroísmo

Raúl HERNANDEZ

14 de julio, 2010

La diputada local Imelda Mangin Torre les entregó reconocimientos a los comandantes de Bomberos, Juan Angel Villasana Montalvo y Gil Armando Arroyo Fuentes, por el heroísmo con que actuaron durante la creciente del río Bravo. Ambos, se aventaron al río para amarrar y luego sacar, varias cajas trailers que arrastraba la corriente y de no haberlo hecho, las cajas hubiesen chocado con la estructura del puente I, con el riesgo de causar daños, además de que podría formarse una represa. También ayudaron a rescatar a dos jóvenes que se metieron al río con la intención de cruzar al lado americano, pero la corriente los arrastro. Después, fueron a ayudar en el rescate de personas varadas por el desbordamiento del río Salado. Los dos expusieron sus propias vidas, a cambio de proteger a la comunidad. La diputada Mangin además de entregarles un reconocimiento también les entregó un premio en efectivo. Durante este evento, salió a relucir que Villasana está a punto de ser padre, pues su novia está a menos de un mes de aliviarse, lo que aumenta el mérito de su heroísmo. Habrá quien ante este tipo de reconocimientos públicos opine que los bomberos sólo cumplieron con su trabajo y tienen razón, pero también es cierto que ante el peligro, muy bien podían excusarse para no arriesgar sus vidas. Después de todo, no se les puede obligar a exponer su integridad física, a cambio de proteger la de otros. En días pasados, el propio alcalde Ramón Garza Barrios hizo un reconocimiento a todo el personal de protección civil y bomberos y adelanto que habrá una ceremonia especial en la que a nombre de la comunidad se les reconocerá. Por otra parte, las recientes elecciones muestran el mal en que se han convertido las posiciones de representación proporcional. En el caso de las diputaciones, hay quienes, en base a sus propios cálculos, opinan que de las 14 posiciones, 7 serían para el PRI, 3 para el PAN, 1 para el PRD, 1 para el PT, 1 para el Verde y 1 para Nueva Alianza. Sin embargo, Francisco Javier Garza de Coss, dirigente estatal del PAN ya adelantó que de acuerdo a sus números les tocan entre 6 y 8 y eso es lo que van a pelear. ¿Valdrá la pena ponerse tan chucho, luego de que se perdió la elección? A nivel local, vimos a candidatos a regidores del PAN que al día siguiente de la elección salieron a decir que los muchos votos obtenidos por el PRI no eran creíbles y que además el PRI no podía decirse ganador, cuando más del 60 por ciento de los ciudadanos empadronados no salieron a votar. Con todo y que descalificaron el triunfo, no son tan dignos como para renunciar a sus posiciones, como sí se hizo en 1983. Pero ya se sabe que la dignidad no viene en una caja de cereal, ni la dan los más altos estudios ni el dinero. Perdida la elección, lo mejor que pueden hacer es esperar a que las autoridades electorales emitan sus resoluciones y aceptarlas, total después de ser derrotados mal se ve que se pongan tan perruchos. Es poco probable que algún día desparezcan estas posiciones de representación proporcional, a pesar de que la gran mayoría de los ciudadanos no están de acuerdo con ellas.