Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
19 de agosto, 2010
Los tres principales jerarcas de la iglesia católica en México se han distinguido por ser polemistas. La controversia los persigue y ellos lejos de intentar apagar el fuego, lo avivan con sus ocurrencias. De vivir en un Estado de Derecho, los tres terminarían siendo enjuiciados por un tribunal civil y con altas probabilidades de ser encarcelados.
Onésimo Cepeda, Obispo de Ecatepec, se vio envuelto en el escándalo cuando salió a relucir que le prestó 130 millones de dólares, en efectivo a la señora Olga Azcárraga Madero. Y aunque se presentó una denuncia penal en su contra, nadie lo llamó para que explicará de dónde obtuvo esos 130 millones, sí es que realmente existeron.
El cardenal Norberto Rivera se ha distinguido por proteger al sacerdote pederasta Nicolás Ramírez al que en vez de ponerlo a disposición de un tribunal civil se le ha enviado a una casa de reposo para curas viola niños, dizque para que enmiende el camino.
Por su parte el cardenal Juan Sandoval Iñiguez se vio como un pelafustán cuando preguntó a los reporteros si a ellos les gustaría que los criaran dos maricones. Este cardenal se asusta de que un bebé sea educado por dos homosexuales o dos lesbianas, pero nada dice en contra de los curas pederastas, como si esto fuese una gracia.
No es la primera vez que la jerarquía se ve envuelta en el escándalo. En los tiempos del Nuncio Apostólico en México Gerónimo Prigione se ventiló los abusos sexuales que este cometía contra la monja Alma Zamora, de la congregación Hijas de la Pureza de la Virgen María, en Aguascalientes.
La Congregación había sido instruida para encargarse de realizar los quehaceres domésticos de la nunciatura y cuando la congregación protesto e intentó proteger a la monja, Prigione amenazó con destruir y disolver el grupo y desde el Vaticano se ordenó a la Congregación callar y acatar lo que ordenara Prigione.
¿Hasta cuándo continuarán creando escándalos los líderes de la iglesia? Seguramente durante muchísimo tiempo, mientras se les sigan tolerando los abusos que cometen a la vista de todo el mundo. Porque hasta eso, se sienten bendecidos por Dios y que por lo tanto pueden hacer todo lo que quieran y nadie debe atreverse a cuestionarlos.
Afortunadamente vivimos en un estado laico, porque de no ser así la jerarquía católica restablecería el tribunal de la Santa Inquisición para castigar a todo el que no piense como ellos.
En otro tema, más sano, en diciembre pasado, la diputada federal Cristabell Zamora gestionó y consiguió que la Fundación Telmex la apoyara con más de mil juguetes que fueron entregados a niños de colonias populares. En fecha más reciente, también consiguió que el Gobernador Eugenio Hernández Flores le autorizara 400 paquetes de materiales de construcción que se entregaron gratuitamente a familias de bajos recursos. También consiguió más de 6 millones para la promoción del deporte y 4 millones para obras de pavimentación. Esto es parte de su trabajo de gestoría y de lo que dará cuenta en su Primer Informe de Actividades que rendirá este sábado, a partir de las 11.00 horas en el Centro Cívico Carlos Cantú Rosas.