Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
Héctor Garcés
Alberto Guerra Salazar
Angel Virgen Alvarado
José Inés Figueroa
Arnoldo García
Max Avila
26 de abril, 2020
Desde el principio de su sexenio, se vio una desconexión entre el Presidente de la republica y la gran mayoría de los gobernadores de los estados, que incluso se ha venido acrecentando con el paso de los meses. Vaya, hasta con aquellos con quienes supuestamente hay afinidad personal, como podría ser el caso de Claudia Sheimbaum y Jaime Bonilla, ha habido ya evidentes desacuerdos que se han reflejado en declaraciones ante medios.
Pero lo que está sucediendo ahora, particularmente en estos momentos tan complicados por la pandemia, es ya de preocuparse. Hablar de separarse del pacto federal es cosa seria.
No se sabe a ciencia cierta si esa supuesta exploración que hacen varios gobernadores, entre ellos el de Tamaulipas, es falsa o verdadera. Lo cierto es que él tema está en el ambiente ya de por sí enrarecido y ahonda esa separación entre mandatarios estatales y el jefe del poder ejecutivo .
El meollo del asunto está hoy en dos puntos básicos, primero la injusta, como,la llaman los gobernadores de los estados involucrados, asignación de recursos a las entidades, de acuerdo a lo que aportan al producto interno bruto nacional.
Y segundo, la ausencia de recursos extras para hacer frente al Covid 19. Dicen los gobernadores inconformes que ellos se las han tenido que arreglar con sus propios recursos, y que la federación prácticamente los ha dejado solos.
La tensión entre la presidencia y los gobiernos de estados como Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Jalisco, Michoacán, Chihuahua y algunos otros, va creciendo. Llama la atención que tampoco ha habido pronunciamientos importantes desde las cámaras de senadores o de diputados.
Una ruptura del pacto federal jurídicamente es complicada y a nadie conviene, de tal modo que lo mejor para México y los mexicanos, es que el presidente escuche a los gobernadores y se llegue a acuerdos importantes.
No olvidemos además que por lo menos 80 millones de mexicanos en 26 entidades federativas son gobernadas por personajes ajenos a Morena, el partido del presidente, y que sin embargo ese instituto político controla ambas cámaras de legisladores.
No son los mejores tiempos para entrar en una disputa. Hoy nuestro país se debate en medio de una pandemia y de un grave problema económico.
Del tema sanitario saldremos, quizás con miles de muertos, pero la cuestión económica nos podría hundir como país.
La unidad es el único camino para evitar una catástrofe en México peor de la que ya estamos viviendo.
Presidente y gobernadores deben dialogar.
J. Guadalupe Díaz Mtz.
Martha Isabel Alvarado
Jose Luis B Garza
Carlos López Arriaga
Clemente Castro