Un instante

Luis Alonso VASQUEZ

11 de mayo, 2009

A Martha Isabel por su confianza La vida está llena de instantes y cada instante es, por si mismo, un reto. Sobrevivir, aprender, crecer... ser feliz son, entre muchas más, tareas y retos implícitos a nuestra naturaleza en que nos afanamos sistemáticamente y que conseguimos sólo de instante en instante. Sin menospreciar la importancia que tiene cada uno de esos retos, me parece que en el que la gran mayoría coincide es en el de la búsqueda constante de la felicidad. La felicidad; ¡es tan efímera y tan eterna! Tan fugaz porque viene de vez en vez y casi de inmediato se vá. Tan eterna porque un sólo instante nos mantiene, nos estimula y nos anima cada vez que viene a la memoria. Ese es el sentimiento que me acompaña al redactar estas líneas. No hace muchos minutos, a las 0:30 de este lunes 11 de mayo de 2009, éste esfuerzo digital acaba de posar su planta en un rinconcito del mágico ciber-espacio y ahí ha desplegado una nueva bandera del periodismo tamaulipeco. Fue un click... un instante. Duró un segundo, pero permanecerá para siempre. Es la felicidad profesional. Un instante irrepetible sólo comparable al instante en que nació Gisselle, mi hija. Espero que ustedes, amigos lectores, nos acompañen a tejer muchos instantes más a partir de éste click. Un brindis por el periodismo y por los reporteros.