Monitoreo permanente a cresta del Bravo para mitigar daños...: CEA

Sandra TOVAR

27 de July, 2020

Los escurrimientos que el huracán Hanna dejó en la Ribereña, así como en el estado de Nuevo León, provocaron que el río Bravo se desbordara e inundara los patios fiscales de la Aduana por lo que autoridades estatales mantienen un  monitoreo permanente.

Luis Javier Pinto, titular de la Comisión Estatal del Agua, indicó que tras una reunión con la Comisión Internacional de Limites y Agua (Cila), se le informó que el volumen de agua que va a pasar por el Bravo es la mitad de lo que pasó en 2010 cuando el huracán Alex, azotó Reynosa.

"No consideran que haya situaciones graves, salvo aquellos que están alojados en el cauce del río, que han hecho construcciones, los cuales van a salir afectados, centros de fiestas, de diversión que no cuentan con permisos, seguramente les va a llegar el agua, no se tiene contemplado que el nivel suba más allá y llegue a las oficinas de la Aduana".

Indicó, que tras un recorrido tanto por los patios fiscales como por las margenes del río Bravo, se encuentran evaluando los posibles daños.

Dijo, que esperan que el volumen de agua no supere los niveles establecidos a fin de que las colonias aledañas no sufran afectaciones.

Se informó, que la Comisión Internacional de Límites y Aguas (Cila), monitorea y lleva un registro de los escurrimientos en diversas estaciones hidrométricas y de los niveles de los almacenamientos que se registran aguas arriba en las presas El Cuchillo, Marte R Gómez, Las Blancas, así como la presa internacional Falcón para tomar la decisión sobre el control de las avenidas del sistema de presas.

Entre las colonias que podrían verse afectadas se encuentran la zona centro, Ejido Los Longorias, 10 de Mayo, El Porvenir, El Banco, Manuel Tárrega, Ferrocarril Oriente, Aquiles Serdán y Carmen Serdán, quienes serán los primeros en evacuar sus viviendas, en caso de que el río suba más su nivel.

Cabe destacar, que hace 10 años, los remanentes del huracán Alex no sólo inundaron las instalaciones de la Aduana sino también provocaron que el Bravo, se llevara entre su cauce, gran parte del territorio mexicano, específicamente, el área conocida como La Playita y además, provocara la evacuación de residentes de las colonias 10 de Mayo y Los Patos, asentados en las márgenes del río.