Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
10 de septiembre, 2018
Aspirantes a “braceros en los Estados Unidos, mexicanos y de otras nacionalidades así como depotados de la Unón Americana participaron, este domingo, en una marcha pacífica para conmemorar el Día del Migrante 2018.La celebración a nivel nacional fue el primer domingo de septiembre.
La caminata partió del monumento a fundadores y fue encabezada por Monseñor Enrique Sánchez Martínez, Obispo de la Diócesis local y el director de la Casa del Migrante Nazaret, Julio López.
Un grupo de jóvenes fueron quienes animaron está caminata que a su paso dejó entre los transeúntes un llamado solidario para los migrantes de esta frontera.
Terminó en la Catedral del Espíritu Santo en donde el Obispo Enrique Sánchez Martínez ofició una misa.Allí, Sánchez Martínez hizo un llamado para que a los migrantes se les dejé de ver y juzgar como delincuentes, cuando en sí, solamente buscan un mejor nivel de vida para sus familias.
"Este domingo especialmente pidámosle a Dios que nos quite la sordera, aquello que nos impide comunicarnos, expresarnos para tener primero un diálogo con él y luego para comunicarnos con nuestros hermanos migrantes que sepamos reconocerlos como nuestros hermanos más vulnerables.
Hoy pedimos por nuestros hermanos migrantes, somos una diócesis, una iglesia de migrantes todos y hoy nos identificamos con Jesús que también fue migrante para que quienes van y vienen y emigran, sean valorados y respetados en sus derechos", puntualizó
Dentro de la celebración, como un signo de solidaridad, algunos niños, portando vestuarios de diferentes estados de la república mexicana, ofrecieron como ofrenda artículos de primera necesidad para los migrantes.Más tarde, en el atrio, se realizó el Festival del Migrante.
El sacerdote Julio Lopez, director de la Casa del Migrante Nazareth, un albergue de la Iglesia católica, habló del derecho a la migración del ser humano.
“La Iglesia está convencida que todos somos hijos de Dios y pues no importa nuestra condición legal o ilegal en el país, todos somos, tenemos ese derecho a la movilidad. La movilidad humana no es un delito, es un derecho y el ser humano por naturaleza está haciendo este movimiento, la Iglesia acompaña”, dijo.
Se recordó a aquellos migrantes que han perdido la vida en la búsqueda del “sueño americano”.En lo que va del 2018, en esta región, en el lado americano, han muerto 65 inmigrantes indocumentados, principalmente por insolación, deshidratación, enfermedad y accidentes vehiculares.
En el lado de Nuevo Laredo han fallecido, principalemente por ahogamiento en el río Bravo, 11 personas. La víctima más reciente fue una mujer, a la fecha no identificada