Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
5 de junio, 2011
Arriba, la plana mayor del PRI en Tamaulipas. Sonrientes y espectadores. Y abajo, la nueva clase política del partido, emocionada, no solo por su nueva encomienda. Hoy llegaron a Victoria 7 mil priístas para ver suelto en el escenario a Humberto Moreira, el líder nacional del PRI que habló, exigió, ordenó, reconoció y bailo cumbia sobre el río de Celso Piña.¡Suena, suena la tambora!.
Ya había dado su mensaje en el auditorio del Polyforum en donde se reunió con Egidio Torre y Lucino Cervantes Duran, para tomarles la protesta a los nuevos líderes municipales del PRI.
Todos los ex dirigentes del PRI estatal que están vivos, llegaron al evento. Menos Ricardo Gamundi.
Con la plana mayor se concentraron los Diputados Federales de Tamaulipas, los diputados Locales, y los Presidentes Municipales.
Ahí estaba Tomás Gloria Requena, el alcalde de San Fernando, llegó con camisa naranja.
No se sintió mal porque el resto de los priístas traían su camisa blanca. No, el Alcalde de San Fernando ingreso al Polyforum con un par de músicos con acordeón y bajo sexto.
Arriba se los festejaron sus compañeros y bromearon con él.
Nunca se había visto a un alcalde como Everardo Villarreal, mandando una y otra señal de que desde ahora, busca la gubernatura de Tamaulipas.
Las mantas que mandó colocar, solo era una parte y había que aprovechar el escenario.
El Polyforum estaba lleno a las 11:30 am, habían llegado priístas de todo el Estado y sabían que a las 12 empezaría el evento.
Y así fue. Egidio Torre y Moreira atravesaron ese mar de priístas para llegar al templete y cuando lo hicieron el gobernador fue el primero en levantar los brazos en señal de triunfo.
Parecía que hoy, arrancaba la operación política de Egidio, el gobernador, a favor de su partido.
Se empapó de las porras, las vivas que lo alimentaron frente a la clase política.
Después Moreira, el líder del PRI que ya cargaba en la espalda la detención de un ‘poderoso’ priísta como es Carlos Hank Rhon.
La noche del sábado, en la casa del Gobernador Egidio, Moreira Valdés, había celebrado su tercer mes como líder nacional del PRI.
“Lo festejamos con unos tacos” lo confeso Moreira. Pero con los priístas bailó.
Después vendrían los mensajes, las exigencias, los deseos y las promesas.
“El 28 de junio se cumple un año de la muerte de Rodolfo Torre, lo enterramos a él, pero no enterremos la exigencia de ver esclarecido