Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
29 de septiembre, 2025
El nuevo proyecto de país enfrenta lo más difícil, sea la transformación de las conciencias en políticos, con sus dignas excepciones desde luego. Sin embargo, innumerables ejemplos ponen en duda presente y futuro de la república. Vergonzoso resulta lo que sucede en algunas esferas del poder. En este sentido no es ocioso insistir en el escándalo del huachicoleo fiscal operado por mandos de la Marina y de otras dependencias involucradas en un delito que sobrepasa los límites del escándalo internacional, convirtiéndose en pesadilla que de alguna forma trastoca los propósitos de cambio. Por supuesto no es el único caso, sino parte de lo que parece un océano de inmundicia que daña aspectos esenciales de la administración.
Y no es que el columnista haya amanecido más amargoso o pesimista que de costumbre, sino que a medida que trascurren los días y las semanas, el ciudadano de a pie comprueba que la condición humana mucho tiene que ver con la ambición personal y la vocación al saqueo de los bienes públicos por parte de quienes tienen acceso a la impunidad simple y llana, mismos que utilizan coraza de acero contra la narrativa presidencial de la que con frecuencia somos escuchas y convidados de piedra por aquello de la impotencia para actuar de manera comunitaria.
Imposible hacer justicia “ojo por ojo diente por diente” como sucede en algunas partes del planeta donde a los ladrones les cortan las manos o más cerca, en poblaciones mexicas que linchan a violadores y en ocasiones hasta los condenan a la hoguera. Desde luego son excesos inconcebibles por el mundo civilizado, pero de que lo merecen, eso-que-ni-que, considerando la desesperación ante la incapacidad o complicidad de autoridades. ¿Acaso la multiplicidad de los grupos delincuenciales se dio por floración natural?. En este aspecto está científicamente comprobado que los delitos más condenables han sido impulsados desde la esfera oficial.
Ni como negar que existen dos realidades: una formada por los esfuerzos de la Señora Presidenta para alcanzar el bienestar general y otra que favorece la inmoralidad a espaldas de las instituciones y de la propia Claudia Sheinbaum. De verdad os digo que el proceso de transformación está resultando más doloroso que un parto en despoblado. Aceptemos que muchos puestos oficiales son utilizados como negocios personales con alta carga de hipocresía y cinismo, sea sin escrúpulos para mentir, robar y traicionar.
Aceptemos también que México sigue siendo un pueblo pobre gobernado por funcionarios ricos. Y ni modo que sea invento cuando los presupuestos que debieran ser para beneficio mayoritario, se emplean en la adquisición de lujosos vehículos, ostentosas residencias y otros bienes, viajes de ensueño, despilfarros en eventos solo de lucimiento personal, utilización exagerada de guaruras, banquetes a diario en restaurants de acceso restringido, etc. ¿Cuál austeridad juarista si buena parte de los consentidos del poder disfrutan vida de millonarios a costa del sacrificio colectivo?... ¿de dónde los merecimientos?.
Ahora mismo sabemos del tristemente célebre Adán Augusto López, líder de la mayoría morenista en el senado, ex gobernador de Tabasco y ex secretario de Gobernación cuya lista de propiedades es interminable y todavía tiene la descarada pretensión de suceder a Doña Claudia. ¡Qué poca progenitora!. Y no le sigo porque ya me encabroné.
SUCEDE QUE
¿A quién pretende engañar el diputado morenista Mario López Hernández, al que apodan “la borrega”, con eso de la visa gringa cancelada?. Como dijo el ranchero y disculpas por la expresión: “este cree que somos pendejos de ahora”.
Y hasta la próxima.