Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
29 de octubre, 2009
Los “Tigres del Norte” fueron censurados debido a que una de sus “rolas” no gustó al gobierno panista. “La granja” se llama y al parecer está basada en la novela “Rebelión en la granja” del inglés George Orwell quien la escribió en 1945 cuando Manuel Ávila Camacho era presidente y México estaba muy lejos de enfrentar los problemas actuales, “entonces no había hambre” diría mi santa abue. Al secretario de Gobernación pareciole que la citada canción es una apología a la violencia que solo verán quienes tienen la mente muy avezada en tales menesteres. Así ha de traer su cabecita el señalado funcionario, digo yo.. Por supuesto la censura oficial es algo que no veíamos desde los tiempos autoritarios de Díaz Ordaz, aunque ahora bien corresponde no solo al patibulario estado de ánimo de los panistas, sino a su convicción de que la cerrazón es el mejor remedio pa’ ejercitar la democracia, u lo que ellos llaman democracia. De manera que les indigna la letra de una ingenua trova que escuchada con atención no tiene nadita de nada, salvo que usted eche a volar la imaginación y se pierda por los tortuosos caminos de la inseguridad. Les enoja pues, aunque el gobierno panista no se detiene a considerar que ahora mismo más violencia que la oficial no puede haber con el frenético arribo de más pobreza y menos empleo, o la imposición de un sistema fiscal rechazado hasta por los empresarios, sus aliados. A propo, ¿qué opina sobre la idea de elevar el IVA al 16 por ciento, “nomás por un año”?. El de la voz diría que en el más rudo de los casos podría adoptarse, pero, ¿ y qué tal así se queda pa’ toda la vida, como sucediera con la mentada tenencia vehicular?. El asunto es riesgoso y harto peligroso a la vez. Estamos con la censura, en este sentido el escribidor considera que su aplicación en la música de “Los tigres” es un ensayo pa’ pegar más arriba, es decir en la literatura, las artes, la política, etc. Remember que en los tiempos de Fox el secretario de Gobernación Carlos María Abascal satanizó “Aura”, aquel inocente libraco de Carlos Fuentes, por considerar que su lectura “no era adecuada para jóvenes”, igual suerte corrieron algunos cuentos de García Márquez. Sea que el ataque a la libertad de expresión y otros derechos constitucionales tiene el inconfundible sello del panismo y ni modo que sea invento si observamos lo que sucede en sindicatos independientes como el SME y sus líderes, o activistas sociales que combaten la privatización del país, como López Obrador. Y nomás porque el bravo diputado Gerardo Fernández Noroña tiene fuero, si no desde cuando las autoridades hubieran encontrado pretexto pa’ encerrarlo o de perdis pa’ darle un buen susto. En cuanto a “el peje” ya ve que exhiben a su hijo quesque porque el muchacho usa ropa de marca o se da el gusto con guapotas chicas. Aunque ya le digo, lo mero grave es la censura que ya empezó y no sabemos hasta donde Calderón la habrá de llevar. Ahora fue “La granja” mañana podría prohibir el Himno Nacional con eso de que está considerado como uno de los más agresivos, nomás vea: “mexicanos al grito de guerra, el acero aprestad y el bridón y retiemble en su centro la tierra al sonoro rugir del cañón…”. SUCEDE QUE Dicese que Ricardo Gamundi hizo lo imposible pa’ presidir el congreso local en noviembre y así responder al informe del Eugenio Hernández Flores. Es más, ya lo daba por seguro pero algo sucedió que impidió cumplir su capricho tocándole a Felipe Garza Narváez la señalada distinción. Mientras tanto podría ser una coincidencia, pero crecen las exigencias de que el dirigente tricolor rinda cuentas de su paso por la administración del legislativo donde al parecer andan volando más de 80 melones. Y deje que hasta la alcaldía de Reynosa se va, se aleja, se esfuma. Como dijo aquel, “las desgracias nunca llegan solas”. Hasta la próxima.