Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
13 de febrero, 2013
La renuncia del Papa Benedicto XVI es sin duda una noticia que conmociona a la grey católica en todos los confines de este país ya que se tenía la costumbre de que se elegía al sucesor una vez que moría el “Santo Padre”.
Monseñor Ruy Rendón Leal, obispo de Matamoros, indicó que al tratarse de una renuncia voluntaria por parte de Benedicto XVI, bajo el argumento de malestares de salud, se conoce a este hecho, como uno sin precedentes en la historia, o por lo menos no en los últimos 600 años.
Considero que aunque la iglesia se ha considerado como una institución divina, también es una institución humana, de la cual sus pastores que también son humanos, están expuestos a los estragos de la edad y las enfermedades.
En palabras del Obispo Ruy Rendón, la Iglesia católica en México no sufrirá un vacío de poder, es decir, todo transcurrirá de manera regular como se había venido realizando, incluso en estos días en que inicia la cuaresma y las celebraciones eucarísticas previas a la crucifixión de Cristo.
“Porque hay que recordar que la iglesia es dirigida por Jesús, como él lo dijo, hasta el fin del mundo, y seguramente él conducirá a la iglesia en estos tiempos que esperemos que no se prolongue y para semana santa podamos contar ya con el nuevo papa”, textualizó.
Dejó claro que no hay información de que un cardenal Mexicano pudiera tener posibilidades de ser el sustituto de Benedicto XVI, porque además es en Europa donde están los cardenales más destacados de la Iglesia Católica Universal.
Explicó que ante la inapelable decisión de Benedicto XVI, éste solo se mantendrá al frente del papado hasta el 28 de febrero, a partir de ahí comienza el periodo de la “sede vacante”, tiempo en que el suplente del papa (Camarlengo) se hace cargo de las cuestiones administrativas, en tanto que el cuerpo cardenalicio del Vaticano entra en el “Conclave” para elegir a su nuevo Papa de entre un pequeño grupo de cardenales conocidos como los “preferidos”, de entre quienes deberá salir “el santo padre”.