Una ardiente tarde en Reynosa

Alberto Guerra Salazar

30 de agosto, 2010

Los dos principales funcionarios del área de política y de justicia de Tamaulipas estaban reunidos el sábado en Reynosa con representantes de cinco países, indignados por el asesinato de 72 compatriotas suyos en San Fernando, y conocieron de primera mano la explosión de tres artefactos.

Hugo Andrés Araujo de la Torre y Jaime Rodríguez Inurrigarro, secretario general y Procurador General de Justicia de Tamaulipas, fueron enviados a Reynosa por el Gobernador Eugenio Hernández Flores.

Conversaban con embajadores y cónsules de Honduras, Guatemala, El Salvador, Ecuador y Brasil, así como con el Sub-secretario de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe Salvador Beltrán del Río, y el alcalde Oscar Luebbert Gutiérrez como anfitrión.

El ingeniero Hernández instruyó a sus dos emisarios para que presten toda la colaboración requerida por los diplomáticos para la identificación y repatriación de los restos de sus connacionales que perdieron la vida en una ejecución masiva ocurrida en un rancho de San Fernando.

Nos tocó estar en el céntrico restaurante La Fogata el mismo sábado a las 14:30 horas cuando estalló un tercer artefacto, presumiblemente una granada, a unos metros del puente internacional Reynosa-Hidalgo.

Dos explosiones sacudieron minutos antes otros cruceros del primer cuadro de la ciudad, aunque esas no las escuchamos por la demora en la revisión del cruce internacional parte mexicana.

Una combinación de policías de Hacienda y de la PFP revisaban todos los vehículos sin importar los colores del semáforo fiscal y explicaron que se trataba de un operativo de tres días (concluye el lunes) compartido con policías federales de la aduana parte estadounidense aunque del cruce Reynosa-Pharr.

Cuando llegamos a La Fogata los meseros entraban atropelladamente al negocio como si hubieran salido igual. También vimos con extrañeza la ausencia de clientes pues sólo dos mesas estaban ocupadas.

Acomodábamos la silla al momento de  escucharse el estruendo que volvió a poner a temblar a los meseros: la primera vez se asustaron por la presencia afuera de una camioneta abandonada, con huellas de impactos de bala, el motor en marcha y las puertas abiertas.

Los escasos clientes fuimos llevados al fondo del negocio para no estar expuestos en los ventanales y sin ocultar el nerviosismo seguimos masticando los alimentos.

En minutos el sector fue invadido por soldados y policías federales que corrían con las armas en posición de ataque, acicateados por la adrenalina desencadenada. No supimos si hubo detenidos pues salimos del negocio lo más rápido posible y con cautela extrema enfilamos la marcha hacia la carretera a Ciudad Victoria.

Topamos en el camino con sendos convoyes de militares y de policías federales que nos dieron momentos de alivio aunque luego poníamos distancia de por medio para no correr el riesgo de quedar en fuego cruzado si acaso descubrían vehículos sospechosos.

Araujo y Rodríguez Inurrigarro cumplieron en Reynosa las órdenes del patrón, al alimón con los comisionados del gobierno federal panista, de facilitar las penosas tareas de los diplomáticos extranjeros, para enviar de regreso a sus casas a los migrantes asesinados.

Sobre ese asunto, el ingeniero Hernández Flores repitió al titular de Gobernación Francisco Blake Mora el exhorto del gobierno de Tamaulipas de implementar una política federal que atienda el fenómeno social de la inmigración tanto de mexicanos como de extranjeros.

Es una historia muy vieja pero nunca atendida el martirologio que padecen los migrantes por culpa de la corrupción y la impunidad de funcionarios de todos los niveles, coludidos con los “pateros” llamados también “polleros”.

El Gobernador Eugenio volvió a llamar al gobierno federal panista a asumir su responsabilidad de brindar protección a los “mojaditos” para que no sean víctimas de secuestro, extorsión, violación, robo y hasta asesinato.

Este episodio de San Fernando causó un revuelo internacional de profundo impacto pues dio renombre a México aunque de manera negativa. El gobierno de Barack Obama recicló la recomendación a sus habitantes de no visitar nuestro país.

Adicionalmente pidió a sus funcionarios diplomáticos llevarse de regreso a sus hijos por el clima de inseguridad.

En dos días más, el Presidente Felipe Calderón Hinojosa cumplirá el mandato constitucional de rendir (por escrito) el informe anual de actividades, que anteriormente era usado como tribuna para hacer anuncios espectaculares, triunfalistas, auto-complacientes.

Seguramente dará el miércoles el abogado Calderón un mensaje por televisión a los mexicanos para regocijarse porque la nación va por el rumbo correcto, ganando la guerra, creciendo como nunca, con las arcas llenas de billetes, pura felicidad.

Así lo presagia la propaganda que atiborra la radio y la televisión con motivo del cuarto informe presidencial.

Cambiamos de tema para avisar que el Secretario de Obras Públicas Alberto Berlanga Bolado visitará hoy el municipio de Río Bravo para revisar los daños a la infraestructura carretera a efecto de calendarizar su rehabilitación.

Así lo anunció el alcalde Roberto Benet Ramos y anticipó que visitarán los tramos afectados de la carretera de cuota Matamoros-Reynosa así como la brecha 124 por el rumbo de la villa de Nuevo Progreso.

Las inundaciones hicieron necesario abrir “ventanas” en la super-carretera que ahora hay qué cerrar para reanudar la circulación vehicular pues ya bajó el nivel del agua.

Los efectos del huracán “Alex” arruinaron la actividad turística de Nuevo Progreso y el gobierno municipal ya ha conseguido que la Secretaría de Turismo canalice recursos para una promoción que haga recuperar la concurrencia de visitantes.

(A condición de que no comisionen al director general de promoción Hugo Garza Gómez pues sus detractores le atribuyen hacer perdido el interés en el cumplimiento de sus funciones por su ambición de colarse al próximo gobierno sexenal).

Benet Ramos también tomó la decisión de proponer al Cabildo la autorización de no subir la tabla de valores catastrales para dejar “congelado” el impuesto predial, en atención al interés de la economía familiar.

También hoy, el Gobernador presidirá en las instalaciones de ITACE (nueva sede en el edificio Tiempo Nuevo) los honores a la bandera.

Por cierto, Eugenio y el Gobernador electo Egidio Torre Cantú volvieron a aparecer juntos en otro evento político, una reunión con presidentes municipales y la directiva estatal del PRI.

La convocatoria fue para dialogar sobre los grandes temas de la agenda política, económica y social así como para intercambiar planteamientos encaminados a logar un mejor Tamaulipas. El futuro, pues.

No sabemos por qué pero la fotografía oficial muestra a alcaldes fallidos con grandes sonrisas, como si quisieran conseguir el perdón del Gobernador electo por el tiradero que van a dejar a los sucesores.

Entre ellos Alejandro Franklin Galindo de San Fernando, Servando López Moreno de Ciudad Miguel Alemán, Arturo Díez Gutiérrez Navarro de Ciudad Victoria, Sergio Posadas Lara de Ciudad Madero.

No sabemos si asistió a la reunión el alcalde de Camargo José Correa o si todavía está refugiado en McAllen, Texas.

Despedimos la colaboración con el aviso de que ayer cumplió años el colega Carlos Garza Vázquez y que hoy tienen fiesta por el mismo motivo Martín Sifuentes Martínez y en el Distrito Federal, Manlio Fabio Beltrones.

Le va a salir muy cargada la factura mensual de teléfono al abogado Rafael Díez Piñeyro, de tantas llamadas de felicitación. Por cierto, ya está en total recuperación post-operatoria.

Correo electrónico albertoguerra65@hotmail.com