Inicia auxilio en Matamoros y, ahora, inundación amenaza también al sur del Estado: Hugo

Angel NAKAMURA

20 de septiembre, 2010

Por el probable desbordamiento del Río Pánuco, derivado de los remanentes del Huracán “Karl”, la zona sur de Tamaulipas, municipios como Madero, Tampico y Altamira, están bajo la amenaza de inundaciones, informó el secretario general del gobierno estatal, Hugo Andrés Araujo de la Torre.

Luego de presidir la ceremonia de honores a la bandera en el Hospital Infantil de Ciudad Victoria, en ausencia del gobernador Eugenio Hernández Flores, el encargado de la política interior en la entidad, indicó que la preocupación es latente porque los pronósticos que ha emitido el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y la Comisión Nacional del Agua (CNA), reportan que seguirán las lluvias en las próximas 72 horas.

En lo que respecta a Matamoros, el funcionario estatal mencionó que todavía hay 37 de las 70 colonias que se inundaron, mientras que un total de 178 personas continúan en diferentes albergues porque sus viviendas resultaron severamente dañadas.

“Tenemos el reporte por parte de Protección Civil, en el sentido de que 70 colonias presentaban severas inundaciones. Se instalaron equipos de bombeo para desalojar el agua bajando el nivel, más sin embargo, hay 37 que permanecen bajo el agua”.

Araujo de la Torre mencionó que tomaron medidas de prevención, como la apertura de más albergues y reforzamiento los existentes, “pues de prolongarse las lluvias se temen nuevas afectaciones”.

Abundó que “de continuar las precipitaciones pluviales, la situación se podría complicar por lo cual se están implementando todas las medidas de prevención, ya han sido requeridas despensas, cobertores y otros materiales como medicamentos al Fondo de Desastres Naturales (FONDEN)”.

“Una vez que descienda el nivel de las aguas para proceder a efectuar una evaluación de los daños por lo cual no se tienen aún cuantificados”, señaló.

El secretario general del gobierno de Tamaulipas, puntualizó que los desfogues de las presas en la zona norte de la entidad y que se viertan al río Bravo están controlados y no presentan ningún riesgo.

Finalizó que este tipo de acciones tienen como propósito el que las presas puedan captar nuevas avenidas de agua.