Con todo el Poder de la Información

Martha Isabel Alvarado (†)

Dirección General

Fernando Flores

Sub Dirección General

El Partenón
Alberto Guerra Salazar

Comparten repudio CDV y Maki

Alberto Guerra Salazar

José Inés Figueroa

Sin salida

José Inés Figueroa

Arnoldo García

NUEVAS TARIFAS

Arnoldo García

Nuevo Laredo

Cien mil

Raúl HERNANDEZ

6 de octubre, 2011

Cien mil votos, es la cifra a la que el PRI aspira a llegar en las elecciones del  1 de julio de 2012, aquí en Nuevo Laredo. Es una cifra brutalmente elevada, si tomamos en cuenta los resultados de las tres últimas elecciones federales.

En el 2003, el PRI obtuvo 45 mil  516 votos con José Manuel Abdala; en el 2006, 61 mil 535 con Horacio Garza Garza; y en el 2009,  61 mil 512 con Cristabell Zamora Cabrera.

Hay pues una diferencia  de 38 mil 488 votos entre la votación  lograda en el 2009 y la meta que se busca en el 2012, que no es  poca cosa.

Ciertamente al PRI le  ha ido mejor en las elecciones locales y en el 2007 obtuvo 71 mil 291 votos  y en el 2010, 83 mil 250 votos, pero ya se sabe que una elección  federal no se vive con la misma intensidad que una  municipal. En la federal, solo está en disputa  una posición, en cambio en una municipal se negocian muchas posiciones. Claro, una elección presidencial  interesa más que una elección federal intermedia.

Los 100 mil votos que el dirigente priista Enrique Reséndez Covarrubias se ha comprometido a  lograr en el próximo proceso, suena a una cifra fantástica, si se toma en cuenta los niveles de participación que se han tenido en esta ciudad,  en los últimos procesos.

En el 2006, votaron  145 mil ciudadanos   por todos los partidos registrados --se trataba de una elección presidencial—y en el 2009  fueron 119 mil. En las elecciones locales  fueron 108 mil en el 2007 y 113 mil en el 2010. El PRI tendría que ir solo, para  garantizar sus 100 mil votos, con el riesgo de que al no haber más candidatos, los mismos militantes terminen por  decidirr que no vale la pena  votar, pues hasta con un voto ganarían.

Ahora que  también  hay que ver lo que digan y las medidas que tomen los otros partidos que seguramente le van a apostar al carisma y votos que logre jalar su candidato presidencial, como ha sucedido en las últimas elecciones.

En otro tema, a propósito de la guardia de honor a la que la UPD ha convocado para esta mañana en el  monumento a Belisario Domínguez,  hay que recordar que a mediados de la década de los ochentas, a raíz de la muerte de Manuel Buendía, en mayo de 1984,  aquí en Nuevo Laredo el periodista Pedro Edmundo Zapata  impuso la modalidad de  rendir honor a la libertad de expresión, precisamente ante la  imagen  de Don Belisario.

La ceremonia se realizó varios años, con una nutrida asistencia de comunicadores,  hasta que la  práctica  cayó en desuso y terminó por suspenderse. Que  bueno que  ahora se retoma y se toma como ejemplo a Don Belisario,  sobre  todo en esta época en que la libertad de expresión esta tan endeble y cada  día es más complicado cumplir con la responsabilidad de informar.

Por otra parte, en el Congreso del Estado se discute sancionar a los diputados que no asistan a comisiones a las reuniones plenarias, como si asistir y hacer bulto, fuese suficiente. En todo caso hay que exigir productividad y esto se aplica en los tres niveles de gobierno.

Hay que desterrar esa vieja práctica de aparentar trabajo mediante la presentación de iniciativas de ley que terminan en un cajón de escritorio y con la presentación   de   puntos de acuerdo en los que se  ofrece desde desterrar la pobreza,  bajar las tarifas de la luz o   viajes en el tiempo a  los alumnos más destacados en su escuela, que  nadie atiende.

   

Más artículos de Raúl HERNANDEZ
El Partenón
José Ángel Solorio

Plurinominales, ayer y hoy

José Ángel Solorio

José Luis B. Garza

Martha Isabel Alvarado

José Luis B. Garza

Carlos López Arriaga

Generación Z, bloque negro

Carlos López Arriaga

Clemente Castro

La confianza se construye

Clemente Castro