Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
17 de diciembre, 2011
Después de más de un año de incumplir la norma constitucional de nombrar el cuerpo completo del IFE, los diputados federales pusieron en manos de un grupo ciudadano la designación de tres consejeros que, por supuesto, tienen identidades partidistas.
Por culpa del retraso, el Instituto Federal Electoral funcionó a medio gas, cojo, a paso de tortuga, pero eso sí, cobrando los consejeros sobre-sueldos fabulosos con el pretexto de que cumplían sobre-cargas de trabajo.
La buena noticia es que los tres nuevos consejeros son personas de alto nivel académico, expertas en temas electorales, con probada honestidad intelectual y comprometidos por el escrutinio nacional al que estarán expuestos, a tener un buen desempeño.
En sus respectivos discursos, los tres favorecidos reconocieron que el IFE ha perdido credibilidad lo que no es ninguna novedad pero sí que lo digan quienes tienen en sus manos la obligación de recuperarle seriedad.
María Marbán Laborde fue presidenta fundadora del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información, IFAI, un organismo que naufragó en Tamaulipas porque en el arranque se le encomendaron a un adorador de la nómina gubernamental y ajeno a la sociedad.
La dama ha sido además consejera del IFE en Jalisco pero también secretaria técnica de la bancada del PAN en el Congreso local de esa misma entidad federativa.
Lorenzo Córdova Vianello es un joven y brillante académico, investigador, analista y conductor de programas de televisión especializados en política, pero su principal prenda es haber sido jefe de asesores del consejero presidente del IFE José Woldenberg, otro auténtico valor del servicio público.
Sergio García Ramírez es el tercero de los nuevos consejeros. Fue secretario general del CEN del PRI pero sin participaciones destacables. Estuvo en la consulta interna para la nominación presidencial que finalmente ganó Carlos Salinas de Gortari.
Una penosa confusión hizo llevar a no pocos lagartones de la época a la casa de García Ramírez para felicitarlo por su “destape”, porque se filtró que el candidato era SG y ellos creyeron que se trataba del entonces Secretario del Trabajo. Las siglas eran Salinas de Gortari.
Don Sergio también fue en un tiempo Procurador General de la República y es famosa la anécdota de que uno de sus colaboradores le jugó la broma de poner sobre su escritorio una planta de ornato que produce mariguana pero él no lo sabía.
El acompletado IFE trabajará a marchas forzadas para terminar de fijar o reorientar las reglas de la competencia presidencial que hagan del desenlace un evento creíble, objetivo, certero, imparcial, inobjetable.
Son todos los atributos de los que careció la elección de 2006 cuando ascendió Calderón a Los Pinos haiga sido como haiga sido.
En tanto que los diputados federales también cerraron el ciclo de sesiones de este año eligiendo entre gritos y sombrerazos a Guadalupe Acosta Naranjo como nuevo presidente de la mesa directiva.
Acosta es títere de Los Chuchos, dueños provisionales del PRD, y la bancada del PRI no lo quiere porque suele hablar mal de Enrique Peña Nieto para quedar bien con el PAN-gobierno.
Hubo una corriente de opinión que favorecía la elección de Alejandro Encinas Rodríguez como nuevo pastor de la cámara baja del Congreso de la Unión, pero el voto de los panistas dio el premio mayor a este otro aventurero de la política.
A propósito del PRD, Horacio Garza Garza desmintió que piense siquiera en la posibilidad de aceptar la invitación de Jorge Valdés Vargas para ser candidato de ese partido a diputado federal por el I distrito.
Valdés filtró en Nuevo Laredo y luego anunció abiertamente en conferencia de prensa victorense que Horacio será el abanderado del partido del sol azteca.
El dos veces presidente municipal de Nuevo Laredo afirmó que no quiere ser diputado federal por segunda ocasión ni si se lo propone el PRI, pues a él le gustaría incursionar en el Senado pero reconoce que no tiene posibilidades.
Por apuros de tiempo hoy recortamos el espacio de esta columna. Emprendimos el viaje de Reynosa a Ciudad Victoria a la una de la tarde y no vimos en todo el trayecto el anunciado refuerzo policiaco cacaraqueado por el Secretario de Seguridad Pública Rafael Lomelí Martínez.
Seis tristes y solitarias patrullas de la policía federal deambulaban por el camino, más un reducido convoy de marinos. Los “ángeles azules” seguramente andaban volando pues no se dignaron desplazarse por la carretera, ninguno.
Por cierto, la estación expendedora de gasolina del poblado La Loma cobra una cuota por el uso de servicios sanitarios siendo que la concesión obliga a la gratuidad. Que lo investigue PEMEX, Turismo, PROFECO o quien resulte responsable.
Tampoco estaba instalado en el horario de 13:00 a 17:00 horas ningún punto de atención a automovilistas en toda la ruta, donde dijo el Secretario que prestarían hasta atención médica y revisión mecánica de vehículos.
El tránsito es intenso y camiones de carga rivalizan en presencia con vehículos particulares cargados de maletas, según se vio en el retén militar de Tres Palos donde se formaron “colas” de kilómetros por la lentitud de la revisión.
Correo electrónico: albertoguerra65@hotmail.com