Nunca, prestaciones mínimas a burócratas durante sexenio del 'Presidente del Empleo': Cepeda

Josué ESCAMILLA

15 de junio, 2012

Debido a que ya se observan despidos en algunas dependencias federales, ante la culminación de los contratos de trabajo por el fin de sexenio, “las oficinas gubernamentales van a quedar desmanteladas y descubiertas, pues a partir de este mes terminaron los contratos de confianza y extraordinarios”, advirtió el presidente de la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos, Jaime Medellín Cepeda.

Dijo que esta situación, indudablemente perjudicará al próximo gobierno que va empezar con el pie izquierdo en cuanto a empleos, toda vez que va encontrar las dependencias federales desmanteladas, sin gente que las opere, sin personal calificado que las atienda, “esto por la necedad de la federación, de no cubrir las vacantes que iban quedando, con tal de que los trabajadores no hicieran antigüedad o tuvieran derechos”, detalló Medellín Cepeda.

“…pero va a quedar al descubierto todo, con ese programa de despidos y no reconocer los contratos de los trabajadores ahora va ser un despido masivo, van a quedar desmanteladas todas las oficinas de gobierno, de por si falta personal en todos lados, con esto no sé quien va atender a los usuarios de las dependencias federales”.

Comentó que al presidente Calderón, “quien se proclamo el presidente del empleo, se le va a caer su teatrito”, pues no quiso que los trabajadores de confianza y extraordinarios hicieran antigüedad, tuvieran protección legal, prestaciones mínimas de bienestar, pero lo más lamentable, dijo el dirigente de la FEDESSP es que al “retirarse estos compañeros que están bajo contrato, se les a volver a recargar el trabajo a los sindicalizados, que de por si es poco y hacen tareas de mas…”

Recordó que desde la administración de Vicente Fox, han sido miles de trabajadores de confianza y extraordinarios que han sido despedidos porque la federación les negó la antigüedad laboral, lo que provocó el desmantelamiento de los sindicatos en México, que anteriormente eran numerosos, poderosos, con infraestructura, ahorita no llegan ni a cientos los sindicalizados en el país.