Los adelantados de MORENA

Martín SIFUENTES

25 de August, 2019

Hasta parece una broma, pero tal parece que ya varios seguidores de Andrés Manuel López Obrador, se sienten con tamaños para buscar la gubernatura de Tamaulipas en el aún muy lejano 2022. 

Y si, suena a broma, porque aparte del muy largo tramo que falta, parece que a los  adelantados aspirantes se les olvida el triste papelón que hizo en Tamaulipas el Movimiento de Regeneración Nacional en la elección de junio de este año, y en la que poco o nada hicieron justamente los que hoy se apuntan. 

También parece que no se han dado cuenta que la presencia de su partido en esta entidad ha venido a menos, y que poco a poco han ido perdiendo a aquella gran mayoría que votó por un cambio en Julio de 2018.

La lista de tempraneros aspirantes morenistas, la conforman personajes que de algún modo u otro, se mueven con un evidente propósito, aún a sabiendas que el camino que les queda por delante es aún muy largo.

José Ramón Gómez Leal, desde su posición como delegado del gobierno federal en Tamaulipas pudiera sentirse con manga ancha, sin embargo no toma en cuenta que poco ha sido lo que ha gravitado políticamente en el tiempo que lleva ahí. 

El senador Américo Villarreal, es un tipo decente y hasta bien intencionado, que ha escuchado también últimamente el canto de las sirenas y lo ponen en la lista de espera automáticamente.

Héctor Garza González, desde hace años presume una relación directa con el hoy presidente de la republica, y se ha encargado de auto promoverse con esa bandera. Analistas serios no lo ven con el tamaño necesario.

Recientemente está siendo muy mentado  un tampiqueño que ha ha hecho su vida fuera de este estado, Rodolfo González Valderrama, quien por ahora es el que menos chance tiene de placearse en la entidad. Sus promotores dicen que es allegado a López Obrador.

Hay quien incluso sube a este nivel al alcalde de Ciudad Madero, Adrian Oceguera y al diputado Erasmo González. Otros más osados, incluyen al alcalde matamorense, Mario López. 

La verdad de las cosas es que ninguno de estos personajes en este momento se puede ver con posibilidades de convertirse en un contrapeso a la fuerza que indudablemente posee en estos momentos el panismo en la entidad.

Tienen de aquí al 2021 para crecer, tomar fuerza y recuperarse de la paliza. La cita electoral de ese año será fundamental para la renovación estatal que se dará al año siguiente. 

Quienes se atengan a su amistad o relación personal con el Ejecutivo, estarán perdidos. Más bien tienen que ocuparse en construir desde ahora una verdadera estructura, que contenga el desgaste natural que está teniendo él gobierno morenista.

Falta un buen tiempo. 

Pero si hoy fuera la elección para la renovación de la gubernatura, sin duda el panismo arrasaría.