Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
25 de diciembre, 2011
Antonio González Sánchez, Obispo de la Diócesis de Victoria, le deseó a los victorenses y tamaulipecos un 2012 lleno de amor, paz y gracia de Dios.
“Ojalá que en los próximos días, con el apoyo del Señor, así como de las autoridades gubernamentales y la ciudadanía en general, se pueda detener la ola de violencia que venimos arrastrando todo el 2011, para tener paz y tranquilidad en la ciudad, el Estado, nuestro País y a
nivel mundial”.
El líder de la Iglesia Católica en la localidad, refirió que los deseos de año nuevo para la institución que dirige, es el poder hacer llegar el evangelio a más personas, en especial a aquellas que han perdido la fe por las circunstancias de los últimos años.
Al hacer un resumen de lo que fueron los últimos 12 meses, González Sánchez mencionó que México se vio impactado severamente por la falta de oportunidades y empleo, crisis económica, así como una guerra que se intensificó contra el crimen organizado.
“Veo todos estos problemas, pero también reconozco el valor de la población que se hizo más fuerte ante todas las circunstancias adversas que se presentaron, eso nos hace ser más humanos y también agradecer el hecho de seguir con ánimos de hacer las cosas bien”.
El Obispo de la Diócesis de Victoria exhortó a los feligreses a tomarse un tiempo durante el último día del año, para reflexionar sobre las acciones positivas y negativas que tuvieron un impacto en su
vida.
“Como si fuera un estado de cuenta celestial, veamos que pedimos prestado al señor, lo que se nos cumplió y donde nos excedimos, para poder rendir cuentas claras y sanas al creador.”