Por la señal…

Max Avila

7 de marzo, 2012

“La incapacidad para el amor es lo que impulsa a buscar el consuelo del poder”. G. García Márquez (El Olor de la guayaba).

 

 

1.- ¿Traerá bendiciones el Papa a México?. Bueno eso deseamos y esperamos. Será una visita en tiempos de guerra y aunque al parecer ya hubo uno que bendijo las armas de Hitler, bueno fuera que en esta ocasión la presencia de Benedicto XV1 sirviera para concluir la pesadilla que los últimos años ha devaluado la existencia humana.

Por supuesto nada tiene que ver que su permanencia por casi 72 horas sea justamente en la tierra donde la vida no vale nada, sea la del maese José  Alfredo. Es mera coincidencia.

Usted dirá  que servirá pa’ documentar la fe y que la señalada visita nada tendrá que ver con la política con todo y que a la iglesia católica siempre se le ha relacionado con el PAN. Pue-que sí, pue-que no. Ha de disculpar pero el escribidor supone que aunque el objetivo sea meramente espiritual no podrá desligarse de la grilla. La cercanía del inicio de las hostilidades lo determinará en considerando por otra parte, que la abstinencia dejará a los candidatos y sus partidos como al recién casado que obligado abandona hogar y mujer y después de un mes retorna más sediento que Moisés en el desierto.

No nos hagamos bolas, Benedicto podría haber escogido otra fecha y sin embargo su visita pintará de azul el escenario en el que ha de decidirse el futuro de la república. “Aunque tú no lo quieras, aunque yo no lo quiera, lo quiso Dios”, dice la canción. Ingenuos seremos si creemos que el panismo no aprovechará la circunstancia. Una palabra, un gesto, una insinuación y bastará pa’ inclinar la balanza.  Revisar las estadísticas relacionadas con el sentido del voto por esos días nos dará la razón. Y si no pa’l baile vamos.

Benedicto visitará  México en tiempos de guerra, digo, ello pone en alerta a un Vaticano bastante deteriorado por los escándalos de curas pederastas, y aunque  el Papa estará en la oportunidad de pedir perdón por los males causados por Marcial Maciel de triste memoria en México,  no deja de preocupar  su presencia en un país que guadalupano y todo, ha permitido al sistema la libertad de crear un ambiente de pecado. Ni como negar que en nuestra ínsula barataria se atenta contra los mandamientos universales de la cristiandad, al parejo que lo hacemos con las garantías individuales que a como están las cosas sirven pa’ nada, pa’ nada y pa’ pura...en concreto como dijo el albañil, tal vez sin querer queriendo, Benedicto vendrá a impulsar el panismo y para capitalizarlo ahí están los estrategas de los Pinos que no se tientan el alma pa’ engañar con las encuestas o encuestar con  el engaño, que pa’l caso es lo mismo.

2.- Ver para creer. Ya sabrá que Manuel Bartlett es candidato al senado de la república. El poblano que en el PRI lo fue todo, menos presidente de México, pero muy cerca estuvo. Hasta este martes fue el enemigo número uno de las izquierdas que ahora lo tienen como uno de sus abanderados. Qué bueno que esto no lo supo mi santa abue, ¡el coraje que hubiera hecho!, más o menos como el que ahora se cargan algunas mujeronas que “se aconsejan y se van” cuando ven acercarse a Paty Araujo de escondidos y misteriosos méritos que le colocan en la antesala de la gran carpa de la simulación, sease en la cámara de diputados. Decíame un laureado priista: “con todo y lo cristiana y buena gente que pueda ser Paty, la verdad es que no tiene defensa posible frente al enojo de compañeras que han hecho talacha toda su vida”. Pues sí.

En cuanto a Bartlett, regresa a las canchas aunque con el equipo que siempre combatió desde el poder tricolor. En el mismo escenario aparece el ex gober de san Luis Potosí Fernando Silva Nieto. Ya no entiendo al mundo, me cai.

SUCEDE QUE

En la sede del CEN tricolor se vieron muy seriecitos a los candidatos a dipus y senadores que uno a uno se fueron tomando la foto con Enrique Peña Nieto. De manera que en la publicidad que pagamos usted y yo, así los veremos, “como que no quiebran un plato y todos los tienen estrellados”. Y hasta la próxima.