Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
29 de mayo, 2013
Es tan grande la desconfianza entre partidos, que la mejor solución que encontraron, fue suspender los programas sociales durante el tiempo que dure el proceso electoral.
La van a pagar los que menos tienen. Sea lo que sea, los apoyos suspendidos, ayudan en un poco a miles de desprotegidos, pero aquí prevaleció el interés por desactivar la histórica mala costumbre de usar políticamente los beneficios sociales.
Porque no podemos ignorarlo, siempre se han servido con la cuchara grande tanto panistas como priistas cuando han tenido la oportunidad del control de los programas sociales. Se ha documentado en multiples ocasiones como funcionarios, candidatos, operadores y líderes de sectores, condicionan groseramente las ayudas que debieran estar libres de contaminación política.
Ahora, supuestamente se observará con lupa cualquier movimiento extraño, pues aun con la puerta cerrada, se temen malos manejos.
Y mientras todo esto sucede, las campañas cada vez van dando más de que hablar.
Hay nerviosismo entre el priismo en Matamoros, luego de un evento panista en el que hubo derroche económico. Sin embargo, la “estructura” tricolor ya va entretejiéndose y creen que en un par de semanas ya estará totalmente conformada.
Hay dudas en Reynosa, porque el PRI aún no conoce a quien se está enfrentando. Y como puede resultar un “flan”, puede ser también un “trabuco”.
Hay frialdad en Tampico, Nuevo Laredo y Victoria, porque el panismo parece que no se ha enterado que la campaña ya comenzó.
El PRD parece que solo en Ciudad Madero podría hacer algo.
Segunda semana de actividad política.
Y sin programas sociales.