Martha Isabel Alvarado
Dirección General
Fernando Flores
Sub Dirección General
5 de junio, 2012
La carretera a Gómez Farías es estrecha…el follaje se cierne a los lados del camino, como una dentellada verde que busca estrangular la víbora de asfalto. De pronto ingresamos a un cosmos de sombras y de espesura que se derrama entre cañadas y ondulaciones serranas…el pueblo de los mangos, está recostado sobre una hamaca que cuelga en el silencio de un trópico , tatuado de calor sofocante, húmedo y esmeralda: el Cielo..su biósfera.
Hablamos de un monte virgen, arropado por las leyes de la república; que representa el poder de una naturaleza desnuda y límpida, algo así como el discurso contundente de la flora y la fauna, elevado a un himno de hermosura y de perfección: el santuario ecológico de Tamaulipas, poblado de ruidos…de hojarascas, de noches y de días…de penumbras eternas, arrulladas en el vientre vegetal de los siglos sin memoria..donde el reloj no existe..y la existencia se vuelve sentencia mineral, hundida en el murmullo de la tierra y su alfombra de restos vegetales, atados a un ciclo de renacimientos infinitos.
A la orilla del camino, los árboles de mango, muestran orondos sus frutos híbridos, de carnosidad sensual. Se balancean en el aire, con su redondez de tonos chapeados, sus pulpas que se adivinan dulces y jugosas, son, una verdadera provocación, y la mirada se llena..y el alma se nutre con solo verlos. Aquello es una genuina pincelada del paraíso.
Si no ha ido usted por estos días a Gómez Farías, vaya y se encontrará con un pequeño rincón, arrancado de un sueño ecológico, entretejido en el océano de sus montes de verde oscuro…ahí la naturaleza no se mide..es arrebatadora y diversa en sus ecosistemas tropicales, montañosos y la magia de las nieblas que cobijan parajes inexplorados.
La biósfera del Cielo no es para masificarla, sino para visitarla ordenadamente como a una iglesia de amor ecológico; como a un altar de oxígeno y de pureza que nos comunica con lo intangible..aquí el espíritu se reconcilia con los instintos primitivos del temor y de la curiosidad…algo nos dice que, en estos parajes, se asienta una idea muy cercana a dios.
La Biósfera del Cielo es contemplación, religiosidad, cadencia, pasión, y abierta sensualidad…carne y oración…beatitud y desafiante deseo de ondulaciones y de formas que asaltan los sentidos y la mirada. Es en síntesis, la fusión del sueño y la realidad..como una escultura de montañas vitales, encaramadas en un perímetro de más de 144 mil hectáreas.
Pinos, encinos, matorrales vigorosos que parecen copar todas las salidas. Flamboyanes, pimentillas que sirven de nido a los loros y las cotorras, chacas, goteadores, más de 743 especies de árboles y arbustos. El ombligo del mundo con sus plantas de edad sin tiempo, siguen en el Cielo..
Por éste gigante verde anduvo ayer martes, Egidio Torre Cantú. El gobernador llegó a las 11 de la mañana en punto al Centro Interpretativo Ecológico, y de inmediato puso en marcha la agenda del Día Mundial del Medio Ambiente. Lo acompañaba el Secretario de Seduma, Homero de la Garza Taméz y el Subsecretario Heberto Cavazos Literas. Una mujer menudita de agradable carácter, la doctora Irma Adriana Gómez Cavazos, dictó una conferencia denominada “La economía Verde”.
En su exposición habló de la necesidad de aprovechar los recursos ecológicos, estableciendo políticas públicas, encaminadas a su preservación. La ponente planteó el dilema de una economía derivada de los recursos naturales, pero sin dañarlos, preservándolos y fortaleciéndolos.
La académica, con experiencia de carácter internacional, dijo que debemos de impulsar el uso de opciones alternas en la generación de energía, tales como la eólica y la solar.
En su momento Torre Cantú que el medio ambiente es un asunto toral, porque de su equilibrio, dependen los ciclos vitales, en todas partes. Aseveró que durante su administración se han dado pasos firmes en la preservación de los recursos naturales, así como el uso de energías renovables y tecnologías limpias.
Una de las condiciones para alcanzar un mejor nivel de vida, dijo el mandatario estatal, es la de cultivar en nosotros mismos, un profundo respeto por la naturaleza.
Me llamó la atención, el documental de 10 minutos que manejaron al final del evento, en el cual se busca hacer conciencia sobre el deterioro en que nosotros mismos, como especie humana, especie superior y pensante, hemos sumido al planeta.
En la reunión de ayer, en la región de la Biósfera estuvieron como invitados, los alcaldes de Llera, Gómez Farías, Ocampo, Jaumave y Nuevo Morelos.
Hacia el atardecer, dejamos atrás ese rincón cósmico de rejalgares, anfibios, venados, zorras, jaguares y reptiles.
Y regresamos a la fauna urbana…mucho más compleja…y más inquietante.
Ayer, Egidio emitió un mensaje desde el Cielo ecológico. El cielo mayor, también se apresta a dar veredictos electorales, políticos y legales.
---------CALDERON Y EL BONO DEL ESCÁNDALO------------
Los tamaulipecos se empiezan a preguntar, a que se debe que, las miles de cosas positivas que ha logrado nuestro estado, buscan ser derribadas por el huracán mediático, impulsado desde el gobierno de Felipe Calderón.
No se vale que el gobierno federal utilice a nuestro estado, como herramienta de la maquinaria amarillista para golpetear a Enrique Peña Nieto, y tratar de reducirlo en su calidad de puntero, durante las últimas tres semanas que le quedan al calendario de las campañas electorales.
Pese a que a nivel nacional, los maestros de la CNTE, sumen al país en la ingobernabilidad, y la patria casi zozobra en la inseguridad y la pobreza, el Presidente insiste en judicializar la lucha por el poder. Lamentablemente, el peje es el que se está beneficiando. El tercer lugar que alcanzará el PAN en las elecciones, será una clara radiografía de la calificación que los mexicanos, le están dando a éste sexenio presidencial.