2015, la guerra ha comenzado

Martín SIFUENTES

14 de diciembre, 2014

Ese golpe, que fue directo a Homero de la Garza, tendrá sus "efectos colaterales", aquí mismo en Tamaulipas, a corto y mediano plazo.

Si acaso, como suponen muchos, el origen del misil político en contra del aun secretario de desarrollo social del estado, es del llamado "fuego amigo", entonces sus creadores debieron pensarlo antes, porque sin duda el impacto, acaba con cualquier aspiración política de Homero de la Garza, pero también le provoca un serio daño a la imagen del PRI tamaulipeco, ya de por sí desgastada por los temas, muy parecidos por cierto con el que nos ocupa, de Tomas Yarrington y Erick Silva.

Y si a eso le sumamos la caída libre en aceptación social, del presidente de la República, que quiérase o no, se liga al priismo, nos da como resultado que en el ánimo popular todo lo que tenga que ver con ese partido, hoy por hoy, es sinónimo de corrupción, de deterioro moral y de desprestigio.

Todo esto en vísperas de un proceso electoral, de la designación de candidatos y del arranque de campañas, hace que el PRI termine el año de malas e inicie el 2015 aun peor.

El tema de Homero de la Garza en si, solo viene a ser una piedra más en el sinuoso camino que le espera a los tricolores, tanto en Tamaulipas como a nivel nacional, ya que el proyecto de tener una gran mayoría en el congreso, está en un grave riesgo, que sólo podría ser salvado si el día de la elección, el abstencionismo siempre presente,  se hace aun mas poderoso.

Según expertos politólogos, ahora convertidos en pitonisos, las votaciones de junio del 2015 serán las menos concurridas de la historia, al conjugarse factores que han desilusionado al electorado y a la población en general.

Y si lo anterior resulta cierto, será algo que pudiera beneficiar en cierto modo al priismo.

Ahora solo queda saber como van a canalizar los demás partidos ese desencanto hacia el presidente y hacia el partido del presidente. Y al hablar de "los demás partidos", no debemos olvidar que el verde, el panal, el PT y convergencia, prácticamente no existen, que el PRD está más desprestigiado que el PRI, que el humanista y el Encuentro Social, son absolutamente desconocidos.

Los beneficiarios de todo esto, parece que solo serán el PAN y probablemente, Morena.

Los panistas, con toda su estructura nacional, sin duda intentarán sacar provecho del mal momento que en general vive el país, del enfado social y del enojo del mexicano común.

López Obrador, si acaso sale bien librado de caso Guerrero, intentará, junto con sus candidatos, convertirse en el mártir y el único capaz de salvar a este país. Sin duda, será nuevamente candidato presidencial en 2018.

En el Tamaulipas del 2014 y del inminente 2015, el panorama político no pinta bien, sino más bien, se ve descolorido.

Una guerra sucia ha comenzado. Y en medio de ella, una sociedad harta que ve con indiferencia como se hacen pedazos unos a otros, aun siendo del mismo partido.