Reynosa, Tamaulipas
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
    
  
  
  
    
    30 de abril, 2012
El concepto de clase trabajadora ya no existe. Tal vez en algún polvoriento libro marxista, ó en cierta retórica literaria de la clase sindical, editado en los años setenta, pueda aun encontrarse. La clase obrera tampoco sobrevive. La terminología laboral, se ha reducido a palabras como empleo, subempleo y desempleo.
El diccionario de la era neoliberal mantiene ahora un léxico diferente entre lo que destaca, la productividad, macroeconomía, libre mercado, planta productiva. Los asalariados han pasado a engrosar categorías cuantitativas, ausentes de sensibilidad. Se les ve y se les maneja, como beneficiarios de las bondades, del gran capital.
En los comunicados oficiales, se destaca el carácter visionario de los inversionistas trasnacionales, (alemanes, asiáticos, españoles), subrayando su heroicidad al crear miles de fuentes laborales. Lo que no se dice es que el 90 por ciento de éste universo, son sueldos bajísimos, que han sido rechazados por los países de origen.
En nuestro país, especialmente en el ramo maquilador, los industriales inversionistas, ahorran millones de dólares, al pagar salarios miserables, a la masa hambrienta y despojada hasta de su dignidad. A cambio de ello, todavía, los pro hombres de la gran empresa, reciben cuantiosos estímulos fiscales. Se les exime de pagar impuestos a la Secretaría de Hacienda. Esa es la realidad del mundo obrero.
Pero…¿que hacen los sindicatos..? ¿A que se dedican estas organizaciones que todavía en los sesentas y setentas, solían alzar la voz para exigir una negociación salarial, más ó menos decorosa..?
El sindicalismo en México y en Tamaulipas, terminó prácticamente en la era del salinismo, cuando los corporativos obreros cetemistas, fueron sometidos por la vía del encarcelamiento y de las acusaciones penales. El 10 de enero de 1989, en ciudad Madero, fue detenido violentamente, el líder petrolero Joaquín Hernández Galicia.
Se le acusó de acopio de armas y de asesinato. Se encarceló también a algunos de sus más cercanos. En Nuevo Laredo, el cacicazgo de Pedro Pérez Ibarra, fue también desmantelado. En Matamoros, el viejo cacique, Agapito González terminó por perder fuerza, y desaparecer de la escena.
¿Quiénes eran estos señores..? ¿Héroes, caudillos ó villanos de la clase obrera..? Objetivamente, se comportaban según las circunstancias. Eran personales camaleónicos, que un día alababan al gobierno, y otro, lanzaban al aire, amenazantes consignas contra los empresarios y a favor de los asalariados. Ese era su juego. De esas reglas obtenían grandes beneficios personales, y repartían las migajas entre la base trabajadora. Su poder llegó a ser desmesurado e incontrolable.
Pero todos ellos desaparecieron con la llegada de la era neoliberal. Los tiempos del libre mercado exigían un ámbito laboral limpio de presiones y de chantajes caciquiles. De esa manera, uno a uno fueron cayendo los dinosaurios del cetemismo .
El fallecimiento del gran patriarca Fidel Velázquez, en 1997, durante el gobierno de Zedillo, marcó prácticamente el derrumbe emblemático de medio siglo de sindicalismo charro, afiliado al PRI. Aunque hoy, a decir verdad, ese sindicalismo rastrero, dadas las condiciones de miseria laboral qué se viven, ya se extraña.
¿Qué tipo de sindicatos son los de ahora..? El sindicalismo ha retrocedido, del charrismo a los sindicatos blancos, controlados directamente por la clase patronal.
¿Qué quiere decir esto..? Bueno, pues que ahora, son los mismos sindicatos los que tienen la función de expoliar a los trabajadores para que cumplan con paradigmas de calidad total en la producción. Se les obliga a que cumplan con estándares de calidad, establecidos en el mercado global. Pero en lo económico se les mantiene con salarios de hambre. Y se les capacita solo lo mínimo.
Los actuales modelos de producción que imperan en el capitalismo neoliberal a la mexicana, son el taylorismo, y el toyotismo. El primero se basa en la maximización y eficientización de la mano de obra, mediante una nueva organización del trabajo. Es aquí donde surgen los supervisores, que vigilan estrechamente la jornada.
El toyotismo surge en Japón, después de la II Guerra Mundial, y se basa en que cada trabajador puede desempeñar a la vez, varias especialidades, eficientando la producción en masa.
En la actualidad, el sindicalismo independiente está sumamente debilitado en México. En cambio, aun subsisten poderosos sindicatos corporativistas, de carácter verticalista y autoritario, como el SNTE de Elba Esther Gordillo, y el Petrolero de Carlos Romero Deschamps. Ambos han sabido sortear doce años de era panista.
¿Cuál es el futuro del sindicalismo mexicano..? Ninguno. Ya sea corporativos, independientes o blancos, el porvenir de la clase trabajadora, sigue siendo nebuloso.
Y sus aumentos salariales…por el orden del 4 por ciento..seguirán siendo de hambre..y de risa.
Hoy, primero de mayo, se celebra el Día Internacional del Trabajo. En algunas regiones del país, por diversas causas, se suspenderán los desfiles. Me parece una buena medida. En honor a la verdad, los obreros, nada tienen que festejar.
---------------NIÑO TAMAULIPECO, HABLA ANTE PEÑA NIETO-----
Por sus cualidades de buen orador, un niño tamaulipeco, de nombre Marco Antonio Puente Zozaya tuvo el honor de hablar a nombre de todos los del país, ante el candidato del PRI a la presidencia de la república. Más allá de su mensaje, que fue realmente interesante, en relación a lo que actualmente sucede en México, el chavalín mostró temple y personalidad, lo cual habla de que, es ya un pequeño líder en potencia. Y es de nuestra tierra.